Argentina y Uruguay emprendieron un plan a través de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU). Por estos días, según informes oficiales, vemos que ha finalizado el plan de dragados del Río Uruguay emprendido por Argentina y Uruguay a traves de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), un acontecimiento con aristas políticas valiosas, porque obviamente arroja beneficios para ambos países y porque en definitiva, rescata al río Uruguay de su viejo enclaustramiento. Lo que no debemos es caer en la simplicidad y decir que han terminado los trabajos de dragados del río Uruguay, No es así, sino algo más valioso y más importante que profundizar canales comerciales de navegación a los límites admisibles. Para nosotros, es más. Porque a todo este plan hay que darle una lectura mas alta, de trascendencia de futuro, que seamos capaces de ver en el horizonte resultados político-económicos positivos.  Antes era el río Uruguay sin cosmética, ahora arreglado a los intereses socio-económicos de ambos países.

Concepción.

En primer lugar, destacamos como muy valioso haber incluido en el plan binacional las obras de dragado del canal de acceso al puerto argentino de Concepción del Uruguay. Es un puerto bien importante que da salida a los productos agroindustriales del norte argentino similares a los nuestros lo que lleva inevitablemente a que los barcos que allí cargan hasta los 23 pies de calado puedan completar bodegas en puertos uruguayos como está ocurriendo ya con barcos que pueden salir a los 12 metros como en Montevideo. O sea, que no somos la alternativa de Concepción del Uruguay sino la complementación. Un hecho que lo vemos como integración portuaria o más bien como complementación portuaria que sustenta con bien la actividad en conjunto. Y también hay que verlo como integración económica de áreas. Así que estas fueron obras inteligentes y con visión.

Casas blancas.

El otro logro que deseamos destacar del plan de dragados son las obras de limpieza y profundización del canal Casas Blancas, de fondos duros, obra largamente acariciada como objetivo pero carente de la acción ejecutiva; un corto tramo bien pegado a nuestra costa. Ahora se dragó entre los Km. 187 al 207, de fondos duros, abierto por primera vez, desde Concepción hasta Paysandú, a 19 pies de profundidad, (17 de navegación) y con 80 m. de ancho de solera.

Detalles.

Según las informaciones que recogimos del Capitan Gaston Silbermann, presidente de la Delegación Uruguaya a la CARU, un hombre clave por el empuje que ha dado al desarrollo de este ambicioso plan de recuperación del río Uruguay, la profundización del canal llegó a los 25 pies con relación a los ceros locales, (23 pies de navegación), desde el Km. cero (Punta Gorda) hasta el Km. 187 del Río Uruguay y ensanchó el canal llevándolo de 80 a 100 metros de solera.  En este tramo se encuentran los puertos de Nueva Palmira, Fray Bentos y Mbopicuá en la margen este y Concepción del U. en la oeste. En él se incorporan 86 boyas nuevas, además de la renovación y reposicionamiento de las anteriores.

Balizamiento.

Antes de entrar en comentarios del balizamiento queremos mencionar las obras realizadas en los famosos cuatro pasos que eran los limitantes del río Uruguay durante decenas de años. Claro, cuando los barcos tenían de calado por debajo de los 18 pies no teníamos problemas. Eso fue también resuelto. Bueno, pasemos entonces al balizamiento del río Uruguay, una obra bien importante para dar seguridad a la navegación sobre todo para los barcos de porte mayor, sean de carga general como portacontenedores. Recordamos que fueron adquiridas por la CARU un total de 137 boyas, bien costosas por cierto, de las cuales 25 fueron para balizar el canal que lleva a Concepción del Uruguay y el resto para los otros canales del propio río.  https://negocios.elpais.com.uy