Duplicó su tamaño en sólo tres meses y afecta las operaciones de la Halley VI, la estación británica crucial para monitorear el cambio climático. Una nueva grieta en la Antártida obligó a los científicos de la estación británica Halley VI a ser evacuados: en sólo tres meses, duplicó su tamaño. Así, la central de investigación estará
cerrada durante el invierno del hemisferio sur como «precaución prudente», comunicó el British Antarctic Survey (BAS).
La evacuación se produjo dos semanas después de la decisión de reubicar a Halley VI por una amenaza mayor: una cavidad, denominada Sima 1, que se abría hacia el sur y había cortado las comunicaciones entre la plataforma y el resto de la estación. http://www.nuestromar.org