Siempre hemos pensado que estamos lejos de un cataclismo medioambiental global, pero en realidad estamos a unos pocos años de que el planeta sufra los embates de nuestra voracidad. Seis destacados científicos y diplomáticos firmaron una carta, publicada en la revista científica Nature, entre ellos la ex directora para el clima de las Naciones Unidas, Christiana Figueres, y el físico Stefan Rahmstorf, en la que advierten que estamos a solo tres años de que se produzca una ola de efectos sumamente negativos por culpa del cambio climático. Según explican los expertos, si reducimos las emisiones de forma permanente para el 2030, podríamos evitar que las temperaturas globales alcancen un umbral irreversible. A nivel mundial, la tasa promedio de aumento de los océanos creció un 50% en los últimos 20 años, y los últimos tres años han sido los más calientes jamás registrados. En 2017, las temperaturas ya alcanzaron los niveles más altos de la historia en algunas áreas, como California o Vietman.

Hagamos algo ya

La carta de los expertos insta a los Gobiernos, empresas, ciudadanos y científicos a abordar de forma inmediata medidas para reducir a nivel global los gases de efecto invernadero. Los devastadores efectos serán, según ellos, una rápida deforestación, inundaciones ocasionadas por el aumento del nivel del mar e impredecibles cambios climáticos que afectarán la agricultura y la vida diaria de todos, especialmente de los habitantes de las costas.

Su plan para ponerle freno a la debacle incluye seis metas para 2020:

1. Aumentar la energía renovable hasta que suponga al menos el 30% del uso de electricidad.

2. Proyectar planes para que las ciudades y los países abandonen la energía de combustibles fósiles en 2050, con una financiación de 300.000 millones de dólares anuales.

3. Promover que al menos el 15% de todos los vehículos nuevos vendidos sean eléctricos.

4. Reducir las emisiones netas de la deforestación.

5. Publicar un plan para reducir a la mitad las emisiones de la deforestación antes de 2050.

6. Alentar al sector financiero a emitir más “bonos ecológicos” para los esfuerzos de mitigación del clima.

Sin embargo, uno de los países más contaminantes del mundo, Estados Unidos, no está muy en sintonía con las solicitudes de la carta. La administración Trump no tiene en su agenda ningún plan para mitigar el calentamiento global, y más bien han impulsado los combustibles fósiles y criticado las energías limpias, tratando al cambio climático de mentira y de exageración. La meta de los cerca de cien países firmantes era limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ° C ; no obstante, de acuerdo con un análisis del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) podríamos superar ese límite en 2026. http://www.lr21.com.uy