Seis empresas chinas interesadas en las vías

0
1536

UPM presentó el primer informe de impacto ambiental. De los diez grupos que se mostraron interesados en realizar las obras de refacción de las vías férreas entre Paso de los Toros y Montevideo, seis son chinos, dijo el ministro de Transporte, Víctor Rossi, en una reunión con vecinos de Las Piedras, según supo El País. En la reunión Rossi señaló también que no habrá otra postergación de la apertura de las ofertas, porque se pretende adjudicar los trabajos entre setiembre y octubre próximo. La apertura iba a ser en marzo pero se postergó hasta el 29 de mayo. El ministro señaló también en esa reunión que el gobierno quiere que los trabajos, que está previsto que insuman 36 meses, comiencen en febrero de 2019. Las expropiaciones continúan y el directorio de AFE decidió otras 24 de predios cercanos a Las Piedras, informó Rossi, que viene realizando estas reuniones en puntos de Canelones y Florida que serán afectados por las obras. La nueva planta de UPM generaría 8.000 puestos de trabajo nuevos en la cadena, US$ 1.100 millones adicionales en exportaciones anuales y US$ 200 millones en salarios. La nueva fábrica se inauguraría en 2022 y se ubicará en el departamento de Durazno, a 5 kilómetros al oeste del pueblo Centenario, en Durazno sobre el río Negro y 6 kilómetros al sureste de Paso de los Toros, Tacuarembó. Ocupará seis padrones con un total de 700 hectáreas. Hoy no hay explotación alguna en el lugar. UPM sostiene que las obras de mejora en las vías beneficiarán a otros sectores y sus ejecutivos ponen el ejemplo de que la reducción de fletes que supondrán implicarían «colocar» el puerto de Montevideo en el departamento de Durazno. El alcalde de Paso de los Toros, Juan José López, dijo a El País que tras una expectativa inicial muy importante, el ambiente se ha calmado en la zona y todavía no se han concretado inversiones relevantes en hotelería o comercios de cara a la próxima planta. Cree que se concretarán una vez que se vean trabajos preparatorios concretos en la zona. La semana pasada estuvieron en Paso de los Toros académicos finlandeses y recibieron muchas consultas sobre el impacto ambiental que tendría la obra. López señaló que OSE está construyendo varios pozos semisurgentes en la ciudad con la intención de sustituir preventivamente al río Negro como fuente de agua potable para la ciudad.

Primer informe.

El pasado 28 de febrero la Dirección Nacional de Medio Ambiente puso a la consideración pública durante diez días hábiles el estudio «Viabilidad Ambiental de Localización» elaborado por el Estudio Ingeniería Ambiental. En el informe, del cual divulgó algunos detalles el ambientalista Eduardo Gudynas, en El Espectador, se especifica que la zona franca de la planta tendrá unas 600 hectáreas. Se detalla que la planta podrá producir 2,1 millones de toneladas anuales de celulosa que se podrían incrementar hasta en un 11% «en base a un proceso de optimización sin necesidad de realizar modificaciones significativas en sus instalaciones». Tendrá una capacidad nominal de producción de energía de 310 megavatios. La madera que abastecerá la planta provendrá de plantaciones de eucaliptos, principalmente de los departamentos de Tacuarembó, Durazno y Cerro Largo y en menor medida de plantaciones de Rivera y Florida y en proporciones aún menores de otros departamentos, detalla el informe. El suministro de madera se sustentará en una combinación de plantaciones propias (UPM-Forestal Oriental), plantaciones de productores privados asociados al programa de Fomento de UPM- Forestal Oriental y plantaciones de productores o empresas independientes, especifica. El área forestada del país (hoy 1 millón de hectáreas) debería incrementarse entre un 6 y un 9% (entre 60.000 y 90.000 hectáreas). La planta generará diferentes tipos de residuos sólidos, que serán gestionados acorde a la normativa vigente. El acceso al predio donde se ubicará la planta desde la Ruta 5 se realiza a través del Camino del Tala, que actualmente cuenta con pavimento de tosca. Durante esta fase, se realizarán mejoras para permitir el tránsito de maquinarias y personal para las fases siguientes. El pavimento final para el Camino del Tala se prevé que sea de hormigón. La necesidad de mano de obra prevista durante la construcción será de 2.850 personas en promedio. Se llegará a un máximo de unas 4.500 personas en los meses de mayor actividad. Este máximo será alcanzado cuando se haya llegado al 25% del avance del obra, aproximadamente. Durante la operación de la planta, habrá entre 400 y 500 empleos directos de tiempo completo, incluyendo trabajadores itinerantes, en los tres turnos. Estos empleos no incluyen los generados en el resto de la cadena productiva, precisa el informe. Las instalaciones tendrán una vida útil de 40 años. Cuando la actualización por áreas de la planta deje de ser una alternativa válida, la principal opción será construir una nueva planta en el mismo lugar. La segunda será la clausura. www.elpais.com.uy

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí