En 2015 y por primera vez desde 1977, se registraron dos años consecutivos con una caída en la producción global de leche. La producción global de leche fue de 1.990 millones de litros con una elaboración predial y la venta directa que acumulan 133 millones de litros; en tanto los restantes 75 millones de litros se destinan al consumo en los propios tambos (humano y para animales).
Si se observa desde 2011 a 2015 el número de remitentes, es notorio que bajó de 3.218 a 2.879, pero las vacas están dando mayores producciones de la mano de mejores dietas. En 2011 la remisión promedio por día eran 1.569 litros y el año pasado quedó en 1.894 litros diarios, según la encuesta de referencia.
POTENCIAL.- En el transcurso del año 2015 las industrias adquirieron 74.100 toneladas de grasa y 66.400 toneladas de proteínas, equivalentes a 3,72 y 3,34 kilogramos por cada 100 litros de leche respectivamente (la leche se paga en base a esa cantidad de sólidos: grasa y proteína). Ambos sólidos vienen evolucionando al alza acumulando 7,06% de la leche, siendo de particular interés como materia prima para las industrias.- A partir de las industrias que efectúan análisis de laboratorio para medir la calidad de la leche —de acuerdo con el Decreto Nº 359/013—, la encuesta de DIEA consultó los volúmenes que cumplen las exigencias mínimas y obligatorias para pertenecer a la máxima calidad «A».
Son aquellas cuyo «recuento de células somáticas» y «recuento bacteriano» no superan 400.000 y 100.000 unidades respectivamente. Durante el 2015 se midió el 95,9% de la leche remitida, dando como resultado que el 89% del volumen —1.700 millones de litros— se encuentran en la categoría «A», siendo un aspecto de alto valor, en especial como país exportador.- ( Noticiasuy )