El director ejecutivo de Oceana, Lasse Gustavsson, denuncia que los europarlamentarios burlan la legislación y además, hacen peligrar el futuro de la pesca en el Mediterráneo Occidental. La organización de conservación marina Oceana ha alertado a los eurodiputados de que los cierres de emergencia podrían ser la «única» solución a la grave crisis de sobrepesca en el Mediterráneo, después de que la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo haya votado este jueves el primer plan plurianual para la pesca demersal en el Mediterráneo Occidental y ha rechazado las medidas de conservación necesarias. Los eurodiputados han rechazado la introducción de medidas necesarias para frenar la crisis de la sobrepesca en el Mediterráneo y según la ONG ignoran así el compromiso que ellos mismos adoptaron en 2013 con la reforma de la Política Pesquera Común (PPC) para devolver todos los stocks pesqueros a niveles sostenibles. La ONG asegura que en la actualidad ocho de cada diez poblaciones de peces del Mediterráneo Occidental sufren sobrepesca. Entre estas especies se incluye a la merluza, salmonetes y diferentes especies de gamba, algunas de las cuales están en riesgo de exclusión.
El director ejecutivo de Oceana, Lasse Gustavsson, denuncia que los europarlamentarios burlan la legislación y además, hacen peligrar el futuro de la pesca en el Mediterráneo Occidental. «Con la actual redacción del plan, habrá menos pescado procedente del Mediterráneo en las mesas de España, Francia e Italia y menos empleo en el sector pesquero, mientras los métodos de pesca destructivos siguen destruyendo la vida marina. Si el Parlamento Europeo desea atenerse a la ley, pronto no les quedará otra opción que cerrar pesquerías para evitar un colapso de poblaciones de peces irreversible. ¿Cómo se lo explicarán a los ciudadanos?», se plantea. Entre las medidas que han rechazado los eurodiputados figuraban la restricción del arrastre de fondo mediante la ampliación de la zona libre de arrastre durante todo el año de 50 a 100 metros de profundidad, una franja costera que es importante para las agregaciones de juveniles y hábitats marinos sensibles. Asimismo, han rechazado establecer el esfuerzo pesquero según las recomendaciones científicas para recuperar y mantener los stocks pesqueros en niveles sostenibles y, por el contrario, han limitado a un máximo de un 10 por ciento la reducción del esfuerzo pesquero. También han aumentado el número máximo de horas autorizadas al día, por lo que en vez de reducir la sobrepesca, la intensifican. Igualmente, han rechazado la posibilidad de fijar un sistema de límites de captura en caso de que la gestión pesquera no consiga devolver los stocks a niveles sostenibles y los científicos recomienden activarlo así como diferentes disposiciones referentes a capturas accidentales de especies protegidas y medidas de conservación para poblaciones de peces. Por último, la ONG «deplora» que el plan que va a ser negociado directamente con el Consejo de la UE en las próximas semanas, sin votación en el pleno del Parlamento Europeo, en el trílogo, que para Oceana es un proceso «no democrático». https://www.ecoticias.com