La agencia científica de Australia, CSIRO, anunció que recogerá muestras de ADN de los tiburones ballenas en el Arrecife Ningaloo, en el noroeste del país, para determinar la edad de este gigantesco pez escurridizo. El equipo de expertos también usará etiquetas satelitales para estudiar las rutas de desplazamiento y la profundidad de sus inmersiones, que se calcula que rondan los 1,8 kilómetros. La recogida de muestras genéticas ayudarán a determinar la edad de estos tiburón ballena (Rhincodon Typus), que pueden llegar a vivir hasta los cien años, y a «calcular la población de la costa occidental de Australia y del este del océano Índico», dijo el experto del CSIRO, Richard Pillans, en un comunicado. «Los etiquetados previos han revelado que los tiburones ballenas viajan dirección al sur, hacia Perth, y otros se han ido hasta el Golfo de Carpentaria, a 3.500 kilómetros de distancia (en la costa norte de Australia)», añadió Pillans. El tiburón ballena, cuya conducta es difícil de estudiar por ser animales muy huidizos, se alimentan en el Arrecife Ningaloo, que forma parte de la Costa Ningaloo, declarada en 2011 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. En el Día Mundial de los Océanos, Pullans recordó que los tiburones ballenas no son inmunes a las amenazas que afectan a los hábitats marinos. «Hay mucho que aprender acerca de los tiburones ballenas y los impactos potenciales de los cambios en los ambientes marinos, pero con más investigaciones esperamos descubrir más, incluyendo dónde se aparean y dan a luz», subrayó el experto. El tiburón ballena, el pez más grande conocido, tiene un dorso de color grisáceo con manchas circulares y líneas horizontales y verticales blancas o amarillas y la barriga completamente blanca. Esta especie habita también en las aguas tropicales de otros países como Honduras, Australia, Filipinas y Tanzania. https://www.elpais.com.uy