Testigos y restos de un tiempo en que nuestra ribera norteña fue una zona que antaño tuvo dinámica actividad. Todo aquel que viaje en auto por la rambla costanera o Rambla Sud América (hoy rambla Dr. Baltasar Brum) a la altura de Entre Ríos o San Fructuoso camino a Capurro, La Teja y el Cerro, al llegar a la vieja Usina eléctrica de Calcagno, hoy de UTE, descubrirá un hermoso y atrayente escenario portuario conformado por las aguas de nuestra bahía, muchas de cuyas añejas presencias son en realidad testigos y restos de un tiempo en que nuestra ribera norteña fue una zona que antaño tuvo dinámica actividad conectada con el puerto y por consiguiente sus tierras fueron muy valoradas y codiciadas. En esa costa herradura estaban instaladas mayormente barracas que recibían carbón y sal en lanchas traídas por remolcadores cuyo carbón o sal habían levantado de los buques de ultramar fondeados en el antepuerto. También esas lanchas llevaban el carbón a las tres barracas que estaban en el mismo puerto —Wilson Sons, Mann George Depots y un tercer terreno barraca que estaba donde la ANP levantó su actual edificio, cruzando la calle Guarani. Creemos que Emilio Reus levantó en ese terreno en contacto con 25 de Agosto que eran las aguas de la bahía la famosa Casa de Baños. Pero la permanencia de aquellas barracas en el Centro del lujoso Montevideo fue hasta 1905 que por decreto del gobierno fueron obligados a retirarse de la zona portuaria. En realidad, estas barracas manipulando carbón se fueron a la zona Aguada donde estaban también los saladeros y la mayoría de todos ellos construyeron muelles de madera a excepción de los que ya estaban instalados en La Teja y en el Cerro. Los 78 terrenos costeros daban todos al mar, eran casi todas tierras submarinas aptas para la construcción de Muelles. Recordamos a los lectores que sobre la bahía de Montevideo, tanto el famoso empresario Emilio Reus como la Compañía Nacional de Crédito y Obras Públicas tenían muchos solares, algunos de los cuales pasaron a propiedad del Banco Hipotecario, Banco Territorial y otros fueron vendidos a la Cía. de Tranvías La Transatlántica, que algunos de ellos los utilizó para su Casa de Baños. Pero muchos de los terrenos que daban sobre la bahía pertenecían a empresas nacionales e internacionales y habían instalado muelles de madera y en algunos casos de hormigón a fin de facilitar el movimiento de sus mercaderías. Siguiendo nuestro viaje en auto por la Rambla Sud América de entonces hoy Rambla Baltasar Brum, a la altura de Entre Ríos estaba instalada en un solar de casi 10 mil metros cuadrados la conocida compañía tranviaria La Transatlántica (1893) que era la Sociedad Tranvía al Paso Molino y el Cerro y este inmenso solar tenía un largo muelle para recibir el carbón para su usina. El Ingeniero Juan V. Calcagno tenía a continuación tres solares en el Arroyo Seco, dos de 7.378 metros cuadrados cada uno y uno de 1.800 metros sobre la Rambla Sud América, delimitados por las calles San Carlos, San Ramón, Convenio, calles que aún existen. Muchos años más tarde, se incorporaron dos muelles, uno de los cuales aún puede verse sus restos. Felizmente hace años sacamos fotos de estos muelles que publicamos hoy y que alguna vez los recorrimos. Pronto no quedará nada. https://negocios.elpais.com.uy