El agua comenzó a retirarse, pero en esquinas puede verse “el montón de cosas” que cada familia debió tirar, dijo diputado Medina del FA. El departamento de Treinta y Tres afronta los días posteriores a las copiosas lluvias que generaron inundaciones en la capital departamental y también en la zona de La Charqueada, que dejaron imágenes áreas de zonas citadinas como si fueran un lago. El diputado frenteamplista Nino Medina dijo a Montevideo Portal que, si bien “se empezó a retirar el agua”, los daños “son muy grandes” a raíz de la crecida del río Olimar y del Cebollatí. Medina valoró que la inundación de estos últimos días se trata de “la segunda más grande en lo que va del siglo”, luego de una registrada en 2007.
“Vemos en las esquinas el montón de cosas que tuvieron que tirar”, ilustró, al comentar sobre distintas recorridas que realizó. El diputado opositor reclama una “inyección especial” del gobierno nacional. Entre las medidas, pide que los entes exoneren las tarifas para las personas que retornan a sus casas y deben afrontar diversos gastos, así como también solicita la duplicación de las transferencias mediante la Tarjeta Uruguay Social (TUS), y que el Banco República extienda los vencimientos de los pagos para productores rurales. De acuerdo con los datos oficiales, los desplazados en el departamento fueron hasta 2.152 personas, según el informe del Sistema Nacional de Emergencias del sábado 11. El legislador frenteamplista reclamó la construcción de la represa de Palo a Pique para contener el impulso de las aguas sobre la capital departamental. “De lo contrario, estos episodios se van a repetir”, alertó. https://www.montevideo.com.uy/