– El índice Baldry, que mide los costos del transporte de contenedores y carga seca, alcanzó su mínimo de tres décadas en agosto pasado. Analistas de Wall Street Journal aseguran que en el mundo hay 30% más barcos de los que se necesitan, lo que tiene contra las cuerdas a las compañías del sector.- La más reciente víctima de la crisis fue la naviera japonesa Daiichi Chuo, la que se declaró en quiebra en las últimas semanas dejando deudas por US$1.000 millones. – Las perspectivas hacia adelante parecen retadoras. La Organización Mundial de Comercio (OMI) indica que tras un crecimiento modesto en el primer trimestre del año, el comercio internacional cayó en el segundo trimestre. Para este periodo la reducción promedio de importaciones y exportaciones fue de 1,5%. Las exportaciones latinoamericanas perdieron 1,5% y las asiáticas 2,5% frente al año anterior.
-Soren Skou, presidente de la mayor naviera del mundo, Maerks Line, señaló en una entrevista al Wall Street Journal que la demanda para el sector crecerá apenas 1,5% este año y es necesario “consolidar” alianzas entre los jugadores del mercado. -Skou cree que su compañía se está beneficiando de los acuerdos para compartir embarcaciones con otras navieras y que podrá profundizar los avances. El empresario asegura que si se logran bajar los costos Maerks Line podrá vivir con fletes bajos. En contraste con los costos de la carga seca, los cargueros de petróleo están teniendo un buen periodo gracias a la sobreproducción de crudo. El Financial Times asegura que la industria podría dar un giro pronto. De hecho, muchas navieras han cambiado sus órdenes de buques de contenedores por naves petroleras. –Fuente: Dinero, Colombia.- (Marítimo Portuario- Chile)