El histórico ferry Eladia Isabel, que durante décadas unió las costas de Uruguay y Argentina, acaba de cruzar el Estrecho de Gibraltar, uno de los pasos marítimos más transitados del mundo, en su viaje final hacia el desguace en Aliaga, Turquía.
El buque, que zarpó de Montevideo a fines de marzo bajo bandera de las Islas Comoras y estatus “to be broken up”, fue seguido atentamente por entusiastas y nostálgicos a través de plataformas de tráfico marítimo como MarineTraffic. Su travesía marcó el cierre de una era para el transporte fluvial en el Río de la Plata.
Una última travesía documentada
El Eladia Isabel fue avistado el 3 de abril frente a las costas de Brasil, tras haber dejado atrás Salvador. Para el 10 de abril, ya había superado Cabo Verde, navegando por el Atlántico oriental con rumbo firme hacia Europa. El 16 de abril, su silueta inconfundible fue detectada al oeste de La Palma, en el archipiélago de las Islas Canarias. Durante el 20 de abril fue fotografiado por un mercante español y las imágenes compartidas en las redes de Marina Mercante Uruguaya y Visión Marítima, las primeras luego de su partida de Montevideo.
Con su ingreso al Mediterráneo, el ferry se acerca a su capítulo final en Aliaga, un reconocido centro internacional de desmantelamiento naval que aplica protocolos estrictos de reciclaje y seguridad ambiental. Se estima que el proceso de desguace comenzará en las próximas semanas, bajo supervisión de la empresa Oceanus Management, actual responsable del buque.
Ícono rioplatense
Construido originalmente para unir Buenos Aires y Montevideo, el Eladia Isabel no solo fue un medio de transporte, sino un símbolo de conexión cultural y social entre ambas orillas del Río de la Plata. Su despedida no pasó desapercibida: desde la nota publicada el 19 de marzo en Visión Marítima por Fernando Pontolillo, su trayecto ha sido cubierto con detalle, en un esfuerzo por rendir homenaje a su legado.
Hoy, mientras navega hacia su destino final, el Eladia Isabel continúa siendo acompañado por quienes lo vieron partir y lo recuerdan como parte del paisaje cotidiano. Su historia, aunque cercana al cierre, sigue escribiéndose sobre las aguas internacionales que alguna vez surcó con orgullo.
Visión Marítima