La Administración Nacional de Puertos (ANP) continúa con el retiro de los buques abandonados en la bahía de Montevideo. La operativa de esta primera fase costará más de 3 millones de dólares. Se trata de una estrategia ambiental, operativa y de seguridad, expresó a Subrayado el presidente de la ANP, Juan Curbelo. El contrato firmado con Fewell SA, integrante del grupo Christophersen, ha permitido el desguace hasta el momento de 16 de los 50 buques abandonados. La empresa remolca las embarcaciones, las desmantela y comercializa las partes. Curbelo subrayó que restringieron el ingreso de los pesqueros y comenzaron con nuevas exigencias. “Básicamente, lo que ahora estamos controlando y se ha ajustado mucho es lo que tiene que ver con los seguros”, indicó el presidente de la ANP. Además, se apela a la responsabilidad de los armadores con los barcos. “Un buque que nosotros entendemos que no nos brinda la seguridad de que frente a algún incidente alguien pueda responder, no ingresa al Puerto de Montevideo”, remarcó. Hay embarcaciones que están en la bahía desde hace décadas, expresó. El proceso para el desguace implica la nacionalización de la embarcación para poder disponer de ella. La ANP firmó un primer contrato para el desguace y esta etapa culminará a mediados del próximo año.
La Administración Nacional de Puertos (ANP) proyecta recaudar entre 3 y 4 millones de dólares por la operativa de los cruceros. Las solicitudes para atracar aumentaron un 10%. Cada crucero abona al puerto entre 50.000 y 60.000 dólares. El pago depende de las horas de permanencia y el tamaño. Actualmente, hay 150 solicitudes de escalas para Montevideo. La temporada 2022-2023 fue considerada por las autoridades como la mejor de los últimos 9 años, y la proyección es que esta la supere. El presidente de la ANP, Juan Curbelo, indicó que en la temporada habrá días con tres y cuatro cruceros en los muelles públicos del puerto.