Petróleo, mineral de hierro, soja y cobre se baten en un escenario que vive momentos claves. Para Ricardo Carvalho, director de calificaciones corporativas de Fitch Brasil es demasiado pronto para sacar conclusiones precipitadas en cuanto al efecto del coronavirus en las exportaciones de commodities de Latinoamérica hacia China: “No podemos evaluar exactamente cuál es el alcance del impacto en las empresas de commodities que tienen a China como su principal mercado. Pero sí lo habrá». En este sentido, sería relevante simplemente por las medidas de prevención y límites a la movilización de personas, bienes y servicios. Cabe destacar que América Latina es para China el segundo proveedor de mineral de hierro, el primero de cobre, el primero de soja y el primero de carne. Brasil, Chile, Perú, Argentina y Uruguay son líderes en exportación de dichos productos a China. Un reciente informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) incluyó la epidemia de coronavirus de China entre los “riesgos significativos a la baja” para las economías latinoamericanas en 2020. Antes del estallido de la epidemia, se proyectaba que la economía de América Latina creciera un magro 1,6% este año. China es el mayor consumidor de crudo del mundo. El precio ha caído un 20% en un mes (enero) y expertos calculan que la merma en la demanda sería de medio millón de barriles diarios. La mezcla mexicana llegó a estar casi 5 dólares por debajo del precio estimado en el presupuesto y no se conoce cuánto se perdería con este precio, porque no es público el dato de cuántos barriles aseguran las coberturas petroleras. La reducción de esta demanda promete impactar incluso a países que no forman parte de la OPEP. Para JP Morgan, según informes en medios nacionales, la proyección de crecimiento en Colombia se rebajaría a 3% este año, en parte debido a que las exportaciones de productos petroleros representan un 40% de su total.
Brasil, que tiene a China como su principal socio desde hace una década, encendió las luces de alerta de su economía frente a la desaceleración de la actividad del país asiático. El mineral de hierro y la soja son los productos que abastecen al mercado chino y que potencian la balanza comercial brasileña. El precio de importación chino de mineral de hierro cayó bruscamente después de la reanudación de la actividad luego del receso del Año Nuevo Chino a fines de enero y continuó disminuyendo hasta los US$84,94 por tonelada métrica, según Fastmarkets MB, totalizando una baja de un 9,4% en dos días.
Para Marcelo Elizondo, representante en Argentina de ISPI (International Society for Performance Improvement) “obviamente podríamos tener problemas si la economía china se desacelera y deja de demandar la misma cantidad de productos agrícolas, sobre todo soja. Argentina exporta a China unos US$4.500 millones por año y el 75% es soja”, cuyo precio en el Mercado de Chicago cayó un 6,13% entre el 21 de enero y el 3 de febrero. Sin embargo, la semana pasada la soja se negoció con ligeras alzas y terminó con un saldo positivo que le puso fin a la racha adversa que se extendió por tres semanas consecutivas. Por otra parte, se confirmó que China ha recibido alrededor de 10 cargamentos de soja provenientes de Brasil y Argentina, lo que alivió las preocupaciones respecto a que el mayor comprador de alimentos del mundo podría cancelar las compras debido a la propagación del coronavirus, según fuentes familiarizadas con el asunto. El cobre, commodity clave en las economías de Chile y Perú, también se ha visto afectado. Al golpe que sufrieron los exportadores de este metal desde el año pasado, producto de la guerra comercial entre China y Estados Unidos, se suma ahora la menor demanda a causa del coronavirus, lo que ha provocado una caída del precio de alrededor del 10% en el último mes. Los compradores chinos de cobre pidieron a las mineras de Chile la semana pasada que retrasen las exportaciones del metal debido al cierre de los puertos en el país asiático como consecuencia del coronavirus. El coordinador de Mercados Mineros de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), Víctor Garay, admitió la reprogramación de algunas entregas.
Sector frutícola
Las exportaciones ecuatorianas a China, el segundo mercado de sus productos no petroleros, no se han visto afectadas como consecuencia del coronavirus. Daniel Legarda, presidente ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Exportaciones (Fedexport), aseguró que «no hemos reportado todavía ninguna baja. Lógicamente el consumo en China se está viendo afectado al momento, pero no es algo que se pueda reportar que se sienta en las exportaciones». Camarón, banano y madera son los principales productos de exportación a China que, en menor medida también compra a Ecuador cacao y flores.
En lo que va de la presente temporada Chile ha exportado a China un total de 264.365 toneladas de frutas frescas, entre los que se incluyen cerezas, arándanos, uvas de mesa, aguacates, nectarinas, ciruelas, manzanas y kiwis, lo que representa un aumento del 27,7% en comparación con el mismo período del año anterior.
El presidente de Asociación de Exportadores de Fruta (Asoex), Ronald Bown, reconoció que la situación «es compleja y requiere un seguimiento constante de su evolución. Confiamos en que las autoridades chinas contengan el virus, con el objetivo de volver a la normalidad en el menor tiempo posible». Cabe señalar que esta jornada finalizará el feriado extendido del Año Nuevo Chino, abriéndose una semana clave para los envíos de productos desde Latinoamérica a China, ya que el país asiático debería retomar la normalidad, al menos en el movimiento portuario, acción que no quita el impacto económico de la reducción de la demanda de China de commodities producidos en nuestro hemisferio.