El gobierno uruguayo liberó el primer pago de 8,2 millones de dólares a la empresa española Cardama, marcando el inicio de la construcción de los nuevos patrulleros oceánicos (OPV) para la Armada Nacional, según informó el ministro de Defensa, Armando Castaingdebat.

La transferencia, confirmada el lunes 9 de diciembre de 2024, corresponde al 10% del costo total del proyecto, cuyo contrato fue firmado en diciembre de 2023. Una segunda cuota será desembolsada una vez que Cardama presente los planos de la «cuaderna maestra», la estructura principal que sostiene el casco del buque.

El proyecto, clave para la renovación de la flota naval uruguaya, estuvo a punto de fracasar en octubre pasado debido a la falta de garantías por parte de Cardama, según recordó el semanario Búsqueda. Este retraso generó críticas, como las realizadas por la senadora Sandra Lazo, integrante de la Comisión de Defensa, quien cuestionó el proceso de compra.

Recientemente, Lazo fue proclamada por el Presidente electo Yamandú Orsi como la próxima Ministra de Defensa Nacional, cargo que asumirá a partir del 1.º de marzo de 2025. Su designación podría abrir una nueva etapa en la relación entre el Ministerio de Defensa y el Astillero español Cardama Shypard.

Por su parte, el ministro saliente, Armando Castaingdebat, advirtió sobre las posibles consecuencias legales de detener el proceso: «El Estado podía enfrentar un lindo juicio si no se avanzaba». También señaló que el costo final del contrato asciende a 80 millones de euros, aunque no descartó posibles ajustes.

La primera de estas patrulleras estaría operativa en aproximadamente un año y medio. El contrato, firmado ya hace un año, el 15 de diciembre de 2023 en Uruguay, contó con la participación del entonces ministro de Defensa, Javier García, y altos mandos de la Armada Nacional. Este acuerdo representa un hito tanto para la defensa uruguaya como para el sector naval español.

Miguel Mieres para Visión Marítima