Además de gestionar entradas y salidas de producto, los robots aportan el valor de la información. La feria de tecnología e innovación Global Robot Expo (GR-EX), que se ha celebrado esta semana en Madrid, ha presentado novedosos ejemplares de logística, como envolvedoras conectadas a una web, robots que detectan obstáculos a treinta metros vía láser y módulos ‘picking’ (selección de artículos) con inteligencia artificial. Los equipos robóticos expuestos en la feria pasan la jornada a pleno rendimiento, mostrando a los asistentes cómo colocan, sujetan, ordenan, administran y envuelven paquetes, algunas de sus funciones. De acuerdo con el socio responsable de robótica de Deloitte, Luis González, en la economía global, el negocio de robótica ha alcanzado los US$11.770.150, cifra que aumentará hasta los US$43.717.700 en 2023, debido a la demanda de software, hardware y servicios que generará este sector, según consignó EFE. De acuerdo al especialista, “los sectores manufacturero y logístico son los más avanzados en robótica porque fueron los primeros en automatizar sus procesos” y, por tanto, “conviven habitualmente” con los robots. Por su parte, César Nosti, gerente de ventas en España y Portugal de Dematic, una empresa que ofrece soluciones tecnológicas para la cadena de suministro indicó que la inversión de las compañías en estas nuevas tecnologías no solo se entiende por su retorno, sino porque es clave para el crecimiento, la flexibilidad y para seguir “el ritmo de su competencia”. La robótica no es ya un componente sino algo que “está intrincado en lo que hacemos”, añadió. Las máquinas inteligentes, además de gestionar entradas y salidas de producto, aportan el valor de la información, comunicando al cliente datos productivos y técnicos, como el ritmo al que trabajan sus aparatos o su estado de mantenimiento, datos que se utilizan en las naves industriales de una compañía para tomar decisiones. Otro caso es el de Aranco, empresa que se dedica al embalaje industrial, que permite a sus clientes acceder a una web para vigilar el trabajo que hacen sus robots. El director de marketing de esa firma, Gari Lara, dijo que antes las máquinas solo estaban conectadas para el servicio técnico, pero que ahora sus envolvedoras comunicadas por 4G aportan datos precisos e “información fiable”.
Almacenaje inteligente
Ahora, los pedidos son gestionados en bodegas inteligentes donde los despachos son preparados por robots y máquinas autónomas, tecnología que se ha instalado en las naves de empresas de diferentes tamaños y sectores -desde moda a alimentación o farmacia- y que trasciende al terreno del comercio electrónico. La directora de marketing de Schaefer, Yolanda Núñez, quien dijo que las empresas no solo compiten en su sector, “sino con otros nuevos actores, como Amazon que es ‘e-commerce’”. La clave para liderar la innovación está en la robótica colaborativa, los “cobots”, la fórmula que más se ha escuchado durante la feria. Se trata de la última tendencia en robótica y, según los expertos, es el trabajo conjunto entre autómatas y trabajadores humanos que busca liberar a estos últimos de las tareas monótonas y repetitivas para que pasen a realizar otras funciones. Estas innovaciones crean valor en la sociedad, como considera el experto en robótica de Deloitte, porque “sustituyen tareas de bajo valor y no empleos”. Por MundoMaritimo