Proyectos de hasta US$3.000 millones se destinarán a la producción hidrógeno verde o derivados. Para el segundo semestre la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (Ancap) de Uruguay realizará un primer llamado internacional con el objetivo de asignar seis áreas para la instalación de parques eólicos marinos, enfocados en la producción a gran escala de hidrógeno verde o derivados para la exportación de energía, reveló Santiago Ferro, gerente de Transición de la entidad, informa El Observador. Ya en 2022 se delinearon 10 parques offshore, de los cuales se optó licitará solo una parte dada la recomendación del Banco Mundial de concretar una primera oferta para posicionar a Uruguay en este ámbito sin el riesgo de saturar el mercado. Las áreas definidas en el mar tienen un potencial de producción de 3 GW de energía, mientras que la capacidad de producción de hidrógeno equivale a 200.000 toneladas por año. De acuerdo con Ancap desde el punto de vista técnico desde el año pasado está todo listo para avanzar y que ahora “todo acordado con el Poder Ejecutivo y siguiendo el trámite administrativo» para concretar la licitación, según expuso el presidente de la entidad, Alejandro Stipanicic. Para ello, en la ley de Rendición de Cuentas de 2021 se definió la ampliación de las atribuciones legales de Ancap para la producción, distribución, comercialización, importación y exportación de hidrógeno verde y derivados (combustibles sintéticos, metanol, amoníaco, líquidos orgánicos portadores de hidrógeno, entre otros) en régimen de libre competencia. Ferro al detallar la oferta indica que «hablamos de hidrógeno o derivados, de la posibilidad de generar la energía en el mar, pero producir el hidrógeno en tierra o puede ser todo enfocado en el mar. Esa flexibilidad es justamente una de las fortalezas del proyecto y es de las cosas que más le interesa a los desarrolladores», apuntó durante una conferencia.
Detalles de la licitación
Las áreas marinas serán dispuestas en forma gratuita y se estima que la concreción de los proyectos requerirá inversiones entre US$2.000 y US$3.000 millones, y que están atados a una demanda de productos asegurada previamente.
Uruguay definirá exigencias de cumplimiento de planes de trabajo y de normativas ambientales. El modelo de contrato incluirá distintas etapas de investigación y análisis, para que las empresas de energía realicen estudios de factibilidad y puedan evaluar el potencial de las áreas. Los períodos de evaluación se podrán extender entre 2 y 10 años, antes que una empresa tenga que decidir si pasa a una etapa de inversión y desarrollo para producir en el área adjudicada. Eventualmente Ancap podría asociarse a un proyecto cuando se presente un plan de desarrollo. https://www.mundomaritimo.cl/