Vigo acoge un simposio con las empresas más innovadoras del naval para reducir la contaminación
Veintiún barcos ya reciclan el calor de las emisiones de sus chimeneas y lo convierten en energía eléctrica. Se trata de un nueva tecnología alemana desarrollada por la empresa Orcan que se ha presentado en el simposio Fishtech en el que se congregan un centenar de profesionales para conocer los últimos avances en tecnología naval. Según explica Marcel Flipse, responsable de aplicaciones marinas de la compañía con sede en Munich, por ahora los clientes de este tipo de solución son armadores alemanes y holandeses. El recuperador de energía se usa también en tierra donde la empresa ya lo ha montado en 200 instalaciones y ahora lo están desarrollando en el mar. Hay un centenar de empresas que se han interesado por esta innovación entre ellos varios armadores de Vigo. El invento supone un ahorro ente el 6 y el 9 % del consumo energético del barco. La recuperadora permite producir cien kilovatios a la hora, lo que se traduce en el menor consumo de fuel para generar electricidad para las instalaciones del barco. El empresario alemán pone de relieve que en su país hay incentivos para instalar este tipo de equipos y las ayudas llegan al 11 % del coste que ronda los 150.000 euros por buque. Marcel Flipse asegura que «en quince años se pueden ahorrar tres millones de euros en gasto de combustible» en un barco de gran tamaño.
En el evento, que tiene lugar en la sede de Afundación, se ha analizado el nuevo marco de reducción de emisiones que se avecina. Elsa Días, una de las responsables de la línea de lubricantes marinos de Repsol, pone de relieve que, a partir del 2020, el contenido de azufre del fuel para navegación tiene que bajar del 3,5 % al 0,5 % y en zonas especialmente protegidas las emisiones solo pueden ser del 0,1 %. En se sentido las refinerías de Repsol ya están trabajando en la producción de nuevos combustibles para barcos mucho más eficientes. Ahora el reto es su implantación en los puertos, señala Elsa Dias, que señala que las primeras terminales que contarán con este tipo de combustible son las de Algeciras, Gibraltar y Las Palmas que son los puntos en los que repostan más los grande sbuques que se mueven entre el Atlántico y el Mediterráneo.
La empresa noruega Thyboron, especializada en compuertas de arrastreros, ha presentado en el simposio nuevos modelos que ofrecen un 55 % menos de resistencia al abrirse y navegar con el aparejo largado. Estos grandes mecanismos modernizados reducen el consumo de fuel en un 25 %, según pone de relieve Roque Varela, uno de los organizadores del evento. Un arrastrero consumo unos dos millones de euros al año en combustible y con estos compartimentos se puede ahorrar en cada marea unos 320.000 euros, señala Varela, una cantidad no despreciable, equivalente a los ingresos que pueden recibir al año los que dirigen el barco. Por su parte, la empresa de ingeniería noruega Ulstein está desarrollando nuevos modelos de arrastreros que también reducen el consumo de combustible. En Noruega están especialmente preocupados por este tema, ya que afecta directamente a la contaminación en los fiordos, donde se van a atajar las emisiones de modo drástico.
