La escasez de recursos para la inversión en defensa es la denominadora común de casi todos los gobiernos uruguayos de los últimos 40 años. C0omo se ha transformado en una costumbre en los últimos gobiernos, año a año se postergan las grandes decisiones relacionadas a las –fuerzas Armadas de Uruguay. Mientras en el resto del mundo se puede pasar por períodos de menos o mayor inversión en el rubro militar, la escasez de recursos para la inversión en defensa es la es la denominadora común de casi todos los gobiernos uruguayos en los últimos 40 años. En ese sentido este gobierno no está siendo muy diferente a sus predecesores. Si bien una buena excusa para los problemas económicos del país pueden ser achacados a la pandemia y a la crisis económica mundial que esta genero, lo cierto es que tampoco se hizo mucho esfuerzo par lograr soluciones alternativas a las proyectadas originalmente t todas las ramas de la Fuerzas Armadas vieron perder capacidades operativas en estos últimos años.
Ejercito: esta a la espera de que EEUU encuentre un sustituto a los M1117 Guardian que originalmente había ofrecido y que ahora están comprometidos para Ucrania. Adicionalmente el gobierno esta buscando alternativas para equipar una fuerza de reacción rápida para Misiones Operativas de Paz bajo bandera de la ONU., En este caso serían una veintena de vehículos que estarían a la orden de la ONU. Esto ha sido aprobado por la ONU pero aún no se ha equipado la fuerza.
Armada: Con la recepción de las tres lanchas Marine Protector el ministerio de Defensa uruguayo decía que se comenzaba el proceso de recambio de material a esta fuerza, algo que el gobierno había prometido. Muy poco se sabe del resto de los planes. Confirmado solo está la recepción de una lancha patrulla Chamsuri por parte de Corea del Sur y se espera para el segundo semestre del 2023. Otra compra que debería avanzar sería la del buque oceanográfico/hidrográficos Mt. Mitchel, que actualmente está a la venta por parte de una empresa privada y que fue inspeccionado por marinos uruguayos. De adquirirse este buque sería con fondos propios de la Armada. El equipamiento y condiciones generales del Mt. Mitchel son muy superiores a lo que posee el Oyarvide ya dado de baja. En su momento el comandante en jefe de la Armada. Almirante Wilson , expresó que las experiencias con las remotorizaciones del velero escuela Cap. Miranda y el ROU 4 Artigas permitieron que la fuerza pudiese analizar mejor el tema optándose por la compra de una unidad que lo remplace.
En lo que respecta a la adquisición de las OPV, aún no ha dado frutos, el ministro de defensa declaró públicamente que se esperará tener una resolución antes de finalizar el 2023.
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