Con fines estratégicos, la empresa también busca incorporar mediante un comodato el predio de la planta cerca de la UAM. Gas Sayago sigue siendo un dolor de cabeza para las autoridades de UTE, Ancap y el Ministerio de Industria. Pese a que la planta regasificadora fue descartada, la empresa aún sigue abierta generando pérdidas por US$ 137 mil mensuales y varios juicios en curso cuyo resultado es incierto. Uno de los principales costos es el Impuesto al Patrimonio que debe pagar por el gasoducto terrestre de 13 kilómetros, que fue construido por la empresa OAS, y va desde el camino Luis Eduardo Pérez y la ruta 5 hasta la playa de Punta Yeguas en Montevideo.
Ese gasoducto está valuado en US$ 43 millones, no tiene ninguna utilidad y está deteriorándose, aunque su futuro puede cambiar, ya que las autoridades de OSE negocian con sus pares de UTE y Ancap (responsables de Gas Sayago) que se lo cedan para adaptarlo y utilizarlo como una línea alternativa de agua potable, según confirmó El Observador con fuentes de las tres empresas.
OSE también pretende que se le ceda en comodato el predio de Gas Sayago ubicado en Camino Pérez, cerca de la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM), para utilizarlo con “fines estratégicos” y logísticos de acopio de materiales, ya que además permite hacer ahí el mantenimiento de la tubería.
El proyecto suponía la construcción de un gasoducto subacuático de unos 3 kilómetros desde la planta regasificadora hasta Punta Yeguas. Ahí se conectaría con el gasoducto terrestre de 13 kilómetros, que a su vez se uniría en Camino Pérez y la Ruta 5 con el troncal del Gasoducto Cruz del Sur, el que usan Montevideo Gas y Conecta para abastecer de gas a la zona metropolitana.
Al frustrarse el proyecto, el gasoducto quedó sin uso, lo que generó pérdidas para el Estado. Las intenciones de quedarse con el gasoducto habían sido adelantadas por el ministro de Industria, Omar Paganini, en el Parlamento el 18 de mayo. “¡Ojalá OSE le encuentre utilidad; ojalá se encuentre una forma de usarlo!”, dijo ante una pregunta del diputado frenteamplista Carlos Piccone. El tema viene siendo monitoreado por el Ministerio de Industria, que visualiza la ubicación como “estratégica” ante el inminente desarrollo de la zona a partir de la UAM. “Va entre dos zonas de Montevideo que tal vez no son la prioridad de OSE, pero si se le encuentra una vuelta a esto será bienvenido”, dijo Paganini ante los legisladores. En OSE la ven como una “inversión gratis” y la idea que analizan es construir un bypass entre las rutas 5 y 1 para tener una mayor salida de agua. Pese a las intenciones, Paganini resaltó que se debía tener presente que el gasoducto no era un caño de agua sino algo “mucho más costoso y complejo” que debía adaptarse y que tiene estaciones de bombeo de gas que no servirán a OSE. “O sea que no estamos diciendo: ¡qué bien que rescatamos el gasoducto!, sino que estamos diciendo: ¡bueno, por lo menos no perdemos tanto!”. El gasoducto incluye una estación de medición y regulación, y un terreno. Estos tres activos tienen un valor de unos US$ 43 millones, según explicó en la misma comparecencia la presidenta de UTE, Silvia Emaldi. El ente energético tiene el 80% de las acciones de Gas Sayago, mientras que a Ancap le corresponde el 20% restante. Buena parte de los costos que tenía Gas Sayago obedecían a trabajos de mantenimiento y seguridad de infraestructura que había sido adquirida. Emaldi señaló que luego del proceso de liquidación (que comenzó en la anterior administración GUIMARAENSción) se “optimizaron y adecuaron los gastos a lo mínimo”. Esto llevó a que el presupuesto descendiera aunque en 2021 las empresas tuvieron que destinar más de US$ 1,5 millones para Gas Sayago.
La jerarca contó que había gastos de seguridad y vigilancia porque hay que asegurar “todas las instalaciones”, sobre todo, “los materiales que están en el predio”.
Uno de los problemas que han encontrado es que ese lugar ha sufrido robos, lo que justifica la urgencia por transferirlo. En las instalaciones aún hay piedras, acrópodos y pilotes que son ofrecidos por los encargados de la liquidación. “El valor de esas ventas, dado que están en el marco de un juicio con OAS, se mantiene en una cuenta, cuyo control lleva el juzgado correspondiente. Son disponibilidades que se suman a Gas Sayago hasta que finalice el juicio que en particular se mantiene con OAS”, sentenció Emaldi. https://www.elobservador.com.uy/